Acerola: planta medicinal originaria de América del Sur, rica en Vitamina C (20 veces más que la naranja) tiene un efecto cicatrizante, reestructurante y anti-oxidante (rico en flavoinoidos, antocianes, Vitamina E y vitamina C). El acerola va a tener así un rol importante en la lucha contra el envejecimiento, ralentizando la destrucción de las membranas celulares y estimulando la producción de colágeno.

Té verde: es uno de los mejores anti-oxidantes, ya que contiene una concentración muy importante de cafeína y numerosos polifénoles, verdaderos destructores de los radicales libres, responsables del envejecimiento cutáneo. Astringente y tonificante, va a activar también la microcirculación cutánea y calmar las inflamaciones.

Espino amarillo: presenta la peculiaridad de reunir numerosos principios activos interesantes, tales como carotenóides (provitamina A), vitamina E, ácidos grasos esenciales (omega 3 y omega 6), ácido palmitoléico (omega 7). Esta asociación única hace que el espino amarillo tenga potentes propiedades anti-oxidantes, anti-radicales libres y anti-edad, así como un poder suavizante, calmante, cicatrizante excepcionales para la piel.

Vid roja: posede una importante actividad tonificante en las venas y va a mejorar la micro-circulación cutánea para obtener un efecto buena cara inmediata. La presencia de oligómeros le aporta una acción anti radicales libres y estabilizadora del colágeno protegiendo así la piel del envejecimiento cutáneo. Astringente, la vid roja va a contribuir cerrar los poros dilatados para obtener un efecto “piel nueva” inmediata visible.